El concejal de centro del ayuntamiento de Madrid, José Enrique Núñez, niega el derecho de información y opinión sobre el orgullo gay a los vecinos


Desde la Asociación de Vecinos de Chueca (AVChueca) denunciamos lo que consideramos una hecho muy grave para el normal funcionamiento de la vida administrativa y democrática de nuestra ciudad.

El hecho que denunciamos es la resolución del concejal del distrito de centro, José Enrique Núñez, por la que DENIEGA CONSIDERAR  PARTE INTERESADA a nuestra asociación, como afectados por las decisiones que este concejal tomará para la autorización del evento MADO (más conocido como Orgullo Gay), basándose en un informe jurídico interno cocinado a medida. Ante lo que ya se ha presentado el oportuno recurso administrativo. 

La Asociación de Vecinos de Chueca está inscrita en los registros públicos de Entidades Ciudadanas del Ayto. de Madrid, con el nº 2.465, y en  el de Asociaciones de la Comunidad de Madrid, con el nº 23.392, respectivamente; y cumple con todas las exigencias administrativas para el ejercicio de sus objetivos - tal y como se recoge en nuestros estatutos depositados en el propio ayuntamiento de Madrid - y para la participación ciudadana. Y por lo tanto, que un elemento de esta administración trate de negarnos dicha consideración, contradiciendo a la propia administración a la que pertenece, lo único que pone en evidencia es un intento personal de negarnos el derecho a la participación ciudadana, el acceso a la información pública y el derecho a la opinión. Es en sí mismo un hecho gravísimo que, con riesgo de extenderse, supone una alteración de las reglas del funcionamiento democrático.

Se imaginan que cada ciudadano o grupo de ciudadanos asociados tuviera que someterse a un tribunal 'jurídico' del propio ayuntamiento cada vez que nos dirigimos al ayuntamiento para ejercer nuestros derechos. No sé si son capaces de imaginarlo, pero se parece peligrosamente a cosas que hemos visto en las películas. Póngale ustedes el título.

Es absurdo pensar que los vecinos y comerciantes a los que representa nuestra asociación no son una parte a considerar en las decisiones de este concejal sobre MADO, cuando este evento privado supone una grave alteración del funcionamiento de nuestro entorno urbano. Nadie que lo conozca puede pensar que las personas que aquí vivimos no vemos alterados nuestros derechos al descanso, a nuestra calidad de vida, a nuestra seguridad, a nuestra movilidad, etc. Sobre todo cuando el propia ayuntamiento de Madrid ha abierto dos expedientes sancionadores a dicho evento, en los años 2010 y 2011, por la alteración del medio ambiente del barrio.  O más aún, cuando el propio concejal sí nos informó de las autorizaciones del MADO en Chueca en la edición de 2011, porque su jurista en ese momento debido de considerar lo que ahora no considera. ¿Tiene sentido tanto incoherencia en lo se supone que debería ser una administración seria?  

Parece evidente que lo que el señor Núñez trata de evitar a toda costa, incluso recurriendo a procedimientos de dudosa legalidad, tener testigos incomodos de sus posibles decisiones arbitrarias. O peor aún, sobre la legalidad de las mismas. 

El concejal del distrito, en el ámbito de sus competencias, autorizó al grupo de hosteleros que organizan este evento privado, con total ánimo de lucro, el uso del espacio público durante 5 días, en Chueca y en otras localizaciones del distrito, para colocar escenarios. Hasta seis escenarios autorizó Núñez al MADO en 2011. En dicha autorización aparecían relacionados, como parte de los escenarios, un número indeterminado de ‘elementos anexos al escenario’; estos elementos tan confusamente definidos no son otra cosa que bares al aire libre en el suelo público. Bares para cuya instalación los organizadores cobran a otros comerciantes cantidades variables, además de obligarles a comprar una determinada cantidad de producto de sus patrocinadores, lo que viene a ser un NEGOCIO REDONDO. Todo ello con el agravante de que la autorización que otorga este concejal lo hace en un marco irregular de monopolio, y no de concurrencia competitiva como marca la ley; y simplemente a cambio de una ridícula fianza para cubrir posibles daños de 6.000 euros. Y todos los servicios municipales de seguridad, limpieza, etc… a su total disposición y coste cero.

No sería entonces bien justo que cada gremio y cada ciudadano de Madrid tuviera derecho a tener 5 días el espacio público a su disposición para venderlo o hacer lo que le placiera con el...

A todas luces, parece evidente que el señor Núñez se siente incomodo al tener que compartir públicamente la gestión que hace de este expediente, todo ello a pesar de ser un servidor público y de ser de público acceso la información administrativa que de su gestión se genera.  Lo cual le coloca en las antípodas de la transparencia informativa de la que habla y sobre la que pretende legislar el gobierno central.

El ayuntamiento de Madrid podría estar amparando con estas autorizaciones un negocio irregular, que cuando menos es éticamente indigerible. No sabemos si nuestra alcaldesa está al corriente de la gestión que hacen sus concejales. Si no lo está creemos que debería de tomar cartas en el asunto; y si lo conoce y está al corriente, entendemos que debería explicar pública y urgentemente qué tipo de gestión se está haciendo al respecto de este tema.